Piriápolis, maravilloso entorno natural y cultural
Seguimos recorriendo Uruguay de la mano de El Kaminante!
Este sábado 7/10 visitamos Piriápolis para disfrutar de su maravilloso entorno natural y cultural.
Comenzamos visitando la Estación de Cría y Fauna Autóctona Cerro Pan de Azúcar, mejor conocida como la Reserva Pan de Azúcar, donde el día soleado nos recibió de brazos abiertos. Allí pudimos caminar por sus senderos y apreciar la belleza de los animales que allí habitan, en conjunto con la belleza de la flora nativa que los circunda.
Los más intrépidos se animaron a subir al Cerro Pan de Azúcar, que con su majestuosidad brinda a los valientes, la recompensa de una vista panorámica incomparable.
Habiendo abandonado la Reserva nos dirigimos por la ruta 37 rumbo al centro de la ciudad. En el camino nos detuvimos para recorrer el Castillo de Piria, primera construcción que Francisco Piria erigió en la zona. Desde allí él tenía una amplia vista de sus tierras, visualizando el horizonte desde el mar hasta el cerro. Luego de un breve recorrido y algunas fotos, seguimos nuestro camino, pasando por la inconclusa Iglesia de Piria, que admiramos desde la ruta.
A la hora del almuerzo nos dirigimos a la zona del puerto, bellísimo lugar donde el suave ruido del mar nos esperaba. Aquellos que decidieron incluir el almuerzo, disfrutaron de un espectacular menú en el Viejo Drakar. Con vista al mar y buena comida, quedamos prontos para seguir paseando!
Continuando el recorrido subimos al Cerro San António, donde cada curva de la empinada calle nos permitía descubrir una vista aún mejor. Ya en la cima pudimos disfrutar de la suave brisa que amansaba el calor del sol. Tuvimos tiempo para fotos, compras y también por qué no, para, siguiendo la tradición, pedirle novio o novia a San Antonio!
Desde allí nos dirigimos al centro de la ciudad, recorriendo su rambla, siempre punto de encuentro y paseo para todos los visitantes. Pudimos ingresar al Hotel Argentino, que también oculta varios misterios de Piria, caminar por la rambla y llevarnos algunas artesanías de enorme belleza.
Finalmente, nos dirigimos al Castillo Pittamiglio en Las Flores. Este lugar construido por Humberto Pittamiglio alberga no solo la llamativa construcción que se observa desde la ruta, sino también un bellísimo jardín y un muy interesante museo interactivo que pudimos visitar. En él pudimos aprender más sobre la historia de este hombre y las obras que dejó como testigos de su filosofía.
Con el sol poniéndose sobre el mar, nos marchamos nuevamente rumbo a Montevideo, algo cansados, pero felices de haber realizado otro paseo que nos permitió acercar el turismo al estilo de El Kaminante a más personas.
