
Ushuaia – Viaje al fin del mundo
Luego de nuestra breve estadía en Río Gallegos, seguiremos con nuestro Viaje al Fin del Mundo, saliendo rumbo al Estrecho de Magallanes para cruzar en transbordador a la Isla Grande. Seguiremos hasta llegar al Parque Nacional Tierra del Fuego, donde nos instalaremos en su capital: Ushuaia; “Fin del Mundo”.
Ushuaia, mundialmente conocida como “la ciudad más austral del mundo”, es capital de la provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur. Fue fundada el 12 de octubre de 1884 por Augusto Lasserre. Se ubica en las costas del canal Beagle y rodeada por la cadena montañosa del Martial, en la bahía de Ushuaia. Además de ser un centro administrativo, es un nudo industrial, portuario y turístico. Es la única ciudad argentina que se encuentra en el lado occidental de los Andes y con costas de aguas pertenecientes al Océano Pacífico. El lema de la ciudad es “Ushuaia, fin del mundo, principio de todo”.
La palabra Ushuaia proviene del idioma yagán: ush “al fondo” y waia “bahía” o “caleta” y significa “bahía profunda o bahía al fondo”; pronunciado “u-sua-ia”, pues la hache es muda y la ese forma una sílaba con la siguiente u y llevando tilde en la primera a. El acta de creación de la Subprefectura, en 1884, cita el nombre “Oshovia”, una de las muchas variaciones de un vocablo en idioma aborigen difícil de pronunciar. El gentilicio de la ciudad es «ushuaiense».
Los primeros pobladores de estas tierras fueron cazadores y recolectores nómadas, que hace más de 11.000 años llegaron a pie desde el norte a la actual isla Grande de Tierra del Fuego, cuando el territorio aún estaba conectado a la Patagonia continental. De estos grupos, surgieron los pueblos selknam y haush. Desde los archipiélagos occidentales de la Patagonia llegó otra oleada de pobladores, los nómadas del mar, yámanas y kawésqar. El 18 de enero de 1869, con conocimiento de los gobiernos argentino y chileno, se estableció una misión anglicana encabezada por Waite Hockin Stirling, formando el primer asentamiento no aborigen del archipiélago, muy próximo a lo que luego sería la ciudad.
A inicios del siglo XX se construyó en las vecindades de la entonces aldea de Ushuaia el célebre presidio, el cual estuvo en servicio como cárcel entre 1902 y 1947, cuando el gobierno lo clausuró. Posteriormente pasó a manos de la Armada Argentina y tras un tiempo de abandono, constituye actualmente el Museo Marítimo y del Presidio de Ushuaia. Entre otras curiosidades, tal presidio contaba con la línea de ferrocarril más austral del mundo, que conducía a los penados desde el presidio a los campos de trabajo situados en lo que actualmente es el Parque Nacional Tierra del Fuego; lugar que había quedado afectado para instalar la Colonia Penal. En la actualidad tal línea férrea se ha reactivado con fines principalmente turísticos, conectando una terminal situada en el ingreso del parque nacional con una estación 7 kilómetros más adelante.
Ushuaia cuenta con una gastronomía típicamente austral, en donde se puede degustar la tradicional centolla fueguina, la merluza negra, el abadejo y el besugo, mariscos y pescados, como así también el asado de cordero patagónico a la cruz. Todos los años, durante el invierno, se realiza el Festival Internacional Gastronómico “Ushuaia a Fuego Lento”, evento en el que se incluyen circuitos gourmet, clases de cocina, degustaciones y capacitación para profesionales. Sin embargo, la mayoría de la población de Ushuaia no consume mariscos, consumen comidas típicamente de Argentina.
La ciudad cuenta con varios museos y centros culturales de interés turístico como: Museo Marítimo y del Presidio de Ushuaia, Museo del Fin del Mundo, Museo Yámana, Museo Acatushun, Galería Temática «Pequeña Historia Fueguina», Casa de la Cultura «Enriqueta Gastelumendi, Antigua Casa Bebán, Paseo Artesanal, Asociación Actuar, Biblioteca Popular Sarmiento, Centro Cultural «Almafuerte», Galería de Arte del Museo Marítimo y Bosque Yatana Fundación Cultivar.
Nos alojaremos tres días en esta ciudad, continuando viaje para volver al continente y seguir hasta Puerto Natales.